Informe de Pueblos Originarios en Córdoba – Impacto social y propuestas de los Pueblos Originarios frente al ASPO por Covid-19 (red GEMAS)
«Donde todxs podamos coexistir»
En esta nota damos a conocer una serie de reflexiones en torno al segundo “Informe de Pueblos Originarios en Córdoba – Impacto social y propuestas de los Pueblos Originarios frente al ASPO por Covid-19 (red GEMAS). Las reflexiones fueron realizadas de manera conjunta por comunidades y migrantes originarios de Córdoba y docentes e investigadorxs de la Facultad de Filosofía y Humanidades de la UNC: Isabel Houssin, Comunidad Timoteo Reyna, Comunidad Chavascate, Comunidad Hijos del Sol Comechingón, Marianela Stagnaro, Carolina Álvarez Ávila, José María Bompadre, Nayla Palacios y Lucas Palladino.
En el marco de un segundo informe nacional realizado para conocer el impacto del Covid en los pueblos originarios, como docentes e investigadorxs de la FFyH y el ICA emprendimos el relevamiento y elaboramos un Informe sobre la situación en Córdoba. El mismo integra, junto con otros, el Informe del Grupo de Estudios sobre Memorias Alterizadas y Subordinadas (Red GEMAS) que registra la situación de familias, comunidades y organizaciones indígenas en las provincias de Neuquén, Río Negro, Chubut, Santa Cruz y Tierra del Fuego, Córdoba, Formosa, Mendoza y Buenos Aires, en el marco del Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio (ASPO). El relevamiento fue realizado durante la segunda quincena del mes de mayo e inicios de junio de 2020, por personas que se identifican como mapuche, mapuche-pehuenche, tehuelche, mapuche-tehuelche, selk‟nam, haush y selk‟nam-haush, qom, comechingon-kamiare, sanaviron y ranquel.
Dentro de este trabajo, en el equipo cordobés consideramos importante abrir un espacio para personas y familias migrantes que adscriben a algún pueblo originario, –diaguita, guaraní, comechingón/henia/camiare, wichi, aymara, quechua o kolla–, debido a que la provincia es receptora de migrantes provenientes de provincias de Argentina o de países vecinos. Además de estas personas, relevamos la situación de 17 comunidades originarias, tanto urbanas como rurales. En este texto, incorporamos reflexiones que se elaboraron en forma conjunta con algunxs participantes del Informe, a semanas de su publicación.
Problemáticas relevadas
El Informe abarcó diferentes temas y problemáticas, algunas de los cuales fueron el resultado de la puesta en común con otrxs colegas del Grupo de Estudios sobre Memorias Alterizadas y Subordinadas (Red GEMAS), que ya venían dialogando y trabajando con referentes y autoridades de comunidades y organizaciones indígenas. Este segundo Informe sobre Covid-19 y Pueblos Originarios, generó reflexiones acerca de los qué y cómo relevar tomando como base la experiencia previa. Así, el informe recorre situaciones y problemas vinculados a la salud, educación, trabajo (en relación de dependencia y trabajadorxs informales e independientes), actividades productivas, acceso a políticas de asistencia social y cuestiones vinculadas al territorio. En los tópicos relevados se vuelve notorio cómo algunas problemáticas se agravaron con la pandemia y el Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio, y otras no revisten tanta relevancia.
Otro punto nodal fue la apuesta por visibilizar no sólo problemas, sino también propuestas y acciones estratégicas de las comunidades en este contexto, muchas de ellas resultan prácticas anteriores a la pandemia. Además de poner en común los posibles tópicos, el equipo local y el resto de lxs colegas del GEMAS coincidimos en cómo llevar adelante este trabajo: tomándonos el tiempo para poder comunicarnos dialógicamente, evitando las preguntas dirigidas. Por eso nos comunicamos con referentes y autoridades comunitarias a través de llamadas telefónicas o whatsapp. En algunos casos, recibimos también textos o audios; estos últimos, luego de ser transcriptos, fueron devueltos a nuestrxs interlocutorxs, quienes, a veces pidieron modificaciones o agregados.
Habiendo transcurrido algunas semanas desde su difusión, invitamos a algunas personas y comunidades relevadas a escribir respecto al Informe, y recibimos diversas reflexiones que nos instaron a pensar en algunas apuestas y desafíos que se abren a partir de ahora.
En cuanto a la iniciativa y el contenido, como migrante, Isabel, rescató que esta fue una excelente iniciativa de relevamiento social, en el marco del Covid-19, que se viene llevando a cabo por nuestras instituciones educativas y de investigación, como son el ICA, la UNC y el GEMAS, lo que brinda la posibilidad de expresión a nuestros pueblos originarios desde las diferentes comunidades, en forma directa, desde y con lxs actores de cada grupo cultural. Esta información permite visualizar, difundir y poder debatir en diálogo intercultural el abordaje de problemas que nos abarcan, como son el cuidado y respeto de nuestros recursos naturales –problemas que también abarcan a nuestras comunidades originarias–, así como el reconocimiento y respeto de sus territorios necesarios para vivir en armonía con el entorno, entre otros. Deberíamos considerar algunas de estas cuestiones por los problemas que hoy se manifiestan para toda la humanidad.
También nosotrxs, comunerxs del Chavascate, hemos leído el informe y creemos que es pertinente a la situación que nos atraviesa. Destacamos la minuciosidad del escrito, reflejando los aspectos más conflictivos que cada comunidad está viviendo en estos momentos. Valoramos la precisión con que se describen las problemáticas en las diferentes áreas tocadas en el relevamiento (trabajo, acceso a la salud, acceso a los programas sociales, educación en tiempos de pandemia), agudizadas por una ausencia de respuestas por parte del gobierno de la provincia de Córdoba.
Leyendo integralmente el informe, como integrantes de la comunidad Timoteo Reyna, nos parece que toda aquella información destinada a visibilizar respetuosamente nuestra presencia contemporánea, en tanto originarixs en Córdoba, es importante y relevante que sea difundida. Esto ayuda a deconstruir aquellas ideas que nos dan por desaparecidxs y que nos encarcelan en un pasado, aparentemente, irrecuperable. Más aún, cuando la intención es compartir datos sobre las problemáticas que atravesamos en las comunidades que no están ligadas a aquellas otras que supuestamente nos “corresponderían” como las “históricas”. Es decir, generalmente, el imaginario social preponderante nos liga no sólo al pasado sino a temáticas como el hambre, el empobrecimiento, la falta de educación y el sufrimiento. Si bien esas son experiencias innegables, en tanto sujetos colectivos subalternizados por más de quinientos años de políticas coloniales, no son las únicas dificultades que atravesamos como originarixs. De allí, que consideramos que el informe tiene un segundo acierto (además de la visibilización de nuestra existencia): poder pensar cómo atravesamos una problemática del presente como la pandemia y evidenciar las cotidianeidades frente a las medidas de confinamiento social ordenadas por el Ejecutivo. Y debe ayudar a lxs no indígenas a comprender que los desafíos que atravesamos no son muy distintos a los que tienen que enfrentar cualquier persona trabajadora en la contemporaneidad. Somos, además de originarixs, laburantes, oficiales, técnicxs, docentes, jubiladxs, estudiantes, etc. Si bien somos pueblos pre-existentes, habitamos la (pos)modernidad y su incierta idea de futuro, por más que hayan intentado exterminarnos primero e invisibilizarnos después.
Nuevos horizontes
¿Qué busca el Informe?¿Qué horizontes abre? Como participante relevada, Isabel, considera que se busca abrir espacios para que otros modos de vivir y sentir puedan manifestarse, aporta a la búsqueda reflexiva de soluciones donde todxs tengan participación activa, hacia un saber planetario con particularidades regionales donde podamos coexistir, desde pequeñas comunidades hasta sociedades más amplias con homologías y diferencias que nos permitan conservar nuestras capacidades creativas en un diálogo fluido de saberes.
En esta misma dirección, consideró que en este contexto de emergencia sanitaria hay medidas urgentes “compensatorias” que el Estado debe tomar y otras de larga data pero igual de urgentes, como hacer cumplir la normativa vigente, especialmente en territorios atravesados por prácticas extractivistas, con avances de sojización, desmonte, desarrollo de minería y proyectos inmobiliarios que arrasan con los ecosistemas y toda posibilidad de vida, con o sin covid; y que afectan tanto a comunidades indígenas como no indígenas. Con este relevamiento nos llegan detalles importantes de cada grupo social en particular y también necesidades en general para abrir el diálogo y participación con y entre las comunidades originarias y con la sociedad en general, no sólo para visualizar necesidades urgentes inmediatas sino también para la participación en la toma de soluciones participativas y creativas, dignas para cada cultura (no asistenciales), respetando cada forma de vida, buscando esa identidad donde entremos todxs.
Desde Hijos de Sol Comechingón, queremos agradecer el interés en las problemáticas de nuestros pueblos y comunidades, que nos permite llevar por otro camino nuestra voz y pensamiento. Y queremos destacar que no sólo es nuestra voz, sino la de nuestrxs ancestrxs, que vienen resonando desde hace ya 500 años. Ya estamos dejando de ser brote para así poder ser árbol, que lleve la voz y los frutos de la Pachamama a las conciencias de la humanidad toda. Por eso también la pandemia nos hizo dar cuenta de que no necesitamos asistencialismo, sino las cosas necesarias para nuestros proyectos y así poder tener libre determinación.
Finalmente, como equipo de antropólogxs, esta fue una experiencia inédita y de muchos aprendizajes. Nos permite abrir nuevas preguntas acerca de los cómo y cuándo podemos aportar para la transformación de realidades –muchas veces lenta–, y con qué herramientas afrontar distintas problemáticas. La experiencia renueva nuestro convencimiento de que las ciencias sociales latinoamericanas deben propiciar no sólo la visibilidad de saberes otros, no hegemónicos, sino también la creación de condiciones donde estos puedan ser tenidos en cuenta y contribuir así a subvertir las relaciones colonialistas que imperan y que a todxs nos atraviesan. Creemos que, desde una antropología comprometida, la apuesta no sólo reside en la labor conjunta con comunidades y organizaciones, sino también en promover y potenciar la interlocución con el Estado en sus diferentes niveles (municipal, provincial o nacional) para así impactar en políticas públicas, en los medios de comunicación y en diversos espacios educativos, culturales, sociales y políticos.
Por: Isabel Houssin, Comunidad Timoteo Reyna, Comunidad Chavascate, Comunidad Hijos del Sol Comechingón, Marianela Stagnaro, Carolina Álvarez Ávila, José María Bompadre, Nayla Palacios y Lucas Palladino de la Facultad de Filosofía y Humanidades de UNC.
Fotos: Taller «Warmis».
Link al Informe de Pueblos Originarios en Córdoba: https://gemasmemoria.com/2020/06/18/2172/
Link al Informe general del GEMAS: